“Chicuarotes” de Gael García Bernal, en el suspenso por escapar.

Por Antonio Harfuch Álvarez

“Chicuarotes” del director y actor mexicano Gael García Bernal, es una de esas películas nacionales que puede resultar tan común como extraordinaria. Heredera del cine que protagonizó a principios de los 2000, tiene la crudeza con la que se retrató la Ciudad de México (esta vez la parte rural) en “Amores Perros” (2000) como el retrato de una juventud reconociéndose en “Y tu mamá también” (2001).

Con guion de Augusto Mendoza (“Abel”, 2010) “Chicuarotes”, gentilicio de los habitantes del pueblo de San Gregorio Atapulco de Xochimilco en la Ciudad de México, comienza con Cagalera (Benny Emmanuel) y Moloteco (Gabriel Carbajal), dos payasos que cuentan chistes en un autobus para ganarse la propina de los pasajeros. Sin éxito y para la sorpresa de Moloteco que sigue cada jugada de su amigo como oveja pasiva, Cagalera saca una pistola y asalta a los pasajeros. “Se los dijimos por las buenas y no hicieron caso”. Este acto será el comienzo de la complicidad entre dos amigos que pasan de payasos a delincuentes.

Al interior de la vida de Cagalera, las cosas no parecen ir bien. Su madre Tonchi (Dolores Heredia) es violentada por su padre alcohólico Baturro, quien vive añorando su pasado como taxista y amigo de Olga Breeskin y El Comanche. También presume de su piel blanca de origen español e insulta sus hijos por tener la piel morena. Cagalera se enfrenta Baturro con terror por defender a su madre y acaba cada noche por huir a casa de su amiga-novia Sugheili (Leidi Gutiérrez) que cuida de dos ajolotes. “Estos animalitos son de aquí y el agua se ha vuelto tan sucia que ya no pueden ni vivir ahí”.

Las puertas para Cagalera están cerradas por todas partes. Por eso no sorprende que recurra a convertirse en delicuente. No como una opción a decidir sino como su único destino: salir del pueblo y empezar una nueva vida con Sugeli. En este intento, su acompañante es Moloteco que no está muy seguro de lo que está haciendo pero que será fiel hasta el último momento.

La decadencia su pueblo los va a alcanzar hasta impedir que logren su cometido. Pero también las contradicciones que hay en una persona entre sus valores y su realidad. Ambos amigos saben que no están haciendo lo correcto pero sus actos parecen tener la inocencia de dos niños que están jugando con fuego. Escondida por fuera está la violencia, la homofobia, el racismo, el machismo y el resentimiento de un país que está perdido. “Chicuarotes” se convierte en un relato de ficción de nuestro tiempo, que es peor de común de lo que pensamos y así de extraordinario de lo que hemos visto. No por su realismo sino por la fatalidad de sus consecuencias; por la ausencia de respuestas y en el suspenso de un intento de escape. Desbordante en tensión, revela el drama de un país del que solo se puede salir con quemaduras o al que hay que preservar en una pecera de cristal.

La película fue presentada en el Festival de Cannes 2019, en una presentación especial fuera de competencia.

XPOSED premia a directoras en su 13ª edición

Por Patricia Ríos.

El Festival de Cine Queer de Berlín XPOSEDllegó al fin de su 13ª edición el pasado domingo 27 de mayo. Este año incluyó trabajos premiados mundialmente como Les Vies de Thérèse y Les Iles, ganadoras de la Queer Palm, así como Three Centimetres, cortometraje ganador del Teddy Award. Asimismo, la legendaria directora austriacaMara Mattuschka presentó su última película Phaidros y dio una clase magistral donde platicó de sus inicios en el cortometraje.

Para el Programa Diversidad Sexual + Morelia representó un ocasión excepcional pues el cine mexicano tuvo una noche especial en un programa invitado al Festival titulado “Cuerpos, juegos y territorios”, que causó un impacto conmovedor en el público internacional debido a la crudeza y sinceridad con la que los seis cortometrajes presentados retratan la diversidad sexual en diferentes regiones y contextos del país.

El festival culminó con la entrega de los premios Lolly, en los que el jurado integrado por el director Lasse Langström, la directora y fotógrafa Zara Zandieh y el curador del Programa de Diversidad + de Morelia Antonio Harfuch, seleccionaron a los cortometrajes ganadores en las diferentes categorías, así como al ganador del Queer Short Film Fund, del cual la misma Zandieh fue ganadora en 2016. Durante la ceremonia se hizo dio una declaración sobre la importancia de las mujeres cineastas este año (siendo todas las ganadoras mujeres), así como un reconocimiento a cada uno de los participantes bajo una ideología de solidaridad frente al espíritu capitalista.

Para el fundador y co-director del festival,Bartholomew Sammut, todos los proyectos son ganadores: “Si no creyéramos que cada uno de ellos puede ganar no los habríamos seleccionado en primer lugar, lo mismo sucede con el Fondo, pero el que estos trabajos hayan resaltado para el jurado les da algo extra, especialmente después de una deliberación tan comprometida, bien pensada y seria” menciona Bartholomew.

El filme de clausura fue Who Will Fuck Daddydel miembro del jurado Lasse Langström, destaca por su estilo onírico en la exploración del género y la sexualidad: “Este es un trabajo que vino desde lo interno, en lugar de lo externo” mencionó el director quien nos brinda a través de su trabajo, un renacimiento personal.

Acompañando este extraordinario proyecto se presentó el cortometraje de producción estadounidense, colombiana y mexicana BorderHole de Amber Bermak y Nadia Granados, quienes se habían presentando en la edición anterior de XPOSED y en el Programa “Xposed en Morelia” en 2017, con su trabajo Tell me When you Die. Nuevamente aplicando el estilo video-performance, las directoras hacen un documental experimental de denuncia, esta vez concentrándose en el discurso de odio estadounidense enfocado en la escisión ellos-nosotros. El país de la libertada con su skyline de progreso industrial y mercantil, es presentando como un sistema de violencia que perpetúa el control y la vigilancia, bajo la excusa de protección contra aquellos peligros “incomprensibles” e “irracionales” que se encarnan en los no-americanos. El cuerpo de la mujer es víctima de este sistema, ya sea la muerte dentro de una bolsa de plástico o la vida enraizada en la cocina.

Debido a su atrevida exploración de las fronteras intangibles dentro de las cuales se rechaza violentamente el cuerpo de la mujer, este cortometraje recibió Mención Honorífica a Mejor Cortometraje XPOSED, categoría en la que resultó el empate de My Own Wings de Katia Repina y Carla Moral, y Latifúndio de Érica Sarmet. El primer cortometraje se enfoca en diversas experiencias de personas intersexuales, trascendiendo lengua, nacionalidad y subjetividad, pero manteniendo en mira las barreras familiares, sociales y personales, gobernadas por la vergüenza que afecta no sólo la visibilización frente a los demás, sino la visión de sus propios cuerpos.

Por su parte, Latifúndio, el primer cortometraje de la brasileña Érica Sarmetresultó ganador gracias a que “creó y nos invitó a un espacio queer dinámico tanto para la risa como para el pensamiento envuelto en una atractiva banda sonora”. En un trabajo atrevido y sin miedo, este cortometraje experimental que formó parte del Programa “Perversión y decadencia” se acerca al cuerpo femenino más allá de lo que lo conforma como materia.

En la categoría Mejor Cortometraje Alemán el ganador fue el formidable Riot Not Diet de Julia Fuhr Mann. Se trata de una película feminista y queer que representa el cuerpo de la mujer “con gracia, en una manera poética, utópica, visualmente cargada y sin vergüenza”. La identidad corporal está definida por su politización y estandarización. En este cortometraje vemos el cuerpo de la mujer en sus detalles e implicaciones sociales. Partiendo de su desnudez nos acercamos íntimamente a los poros y lunares de sus personajes, pero al ser abierto el panorama, las encontramos desafiando la reducción de su carne a su potencial productivo del sistema capitalista, así como el reproductivo, naciente de su construcción como entidad de deseo sexual: “Quería expresar a través del cuerpo, cómo es la mujer en la sociedad”, menciona la joven directora.

En dicha categoría, la Mención Honorífica fue para Va-Bene de Brenda Jorde, documental sobre el artista que da nombre al trabajo. Va-Bene resultó haber nacido en África, pero no por ello se siente obligado ni a dar un discurso artístico africano, ni a aceptar su perfomance como un arte normalizado a lo occidental; él, tanto en su vida artística como personal, va en contra de cualquier categoría. En las culturas donde la mujer es considerada como inferior, su cuerpo es más político que el de cualquier otro. Así, argumentando que el género es performativo en cuanto a la identidad que proyectamos a los demás, Va-Bene incursiona en “los rituales de convertirse en el Otro”, a riesgo de ser percibido como “demoniaco” o “anticristo”. Su directora menciona: “Es un retrato, pero también es un statement, Va-Bene empieza a ser él mismo partiendo de la irritación social”.

Merle Groneweg, co-directora del festival, menciona que la importancia de dar reconocimientos de este tipo se puede apreciar particularmente en este último trabajo: “Es la primera película de Jorde, ella hizo todo, desde el guion hasta la edición y no sabía lo que le deparaba el futuro cinematográfico o si tan siquiera esperaba uno, pero tal vez a partir de esta experiencia haya recibido un empujón para seguir, eso significa mucho para mí”.

Finalmente, el Premio del Público fue para Everything I´m Not de Roman Manfredi, quien retrata a mujeres en Reino Unido según su identidad de género y orientación sexual, no a partir de sus rostros, sino de un acercamiento íntimo y personal a sus hogares que develan la dinámica de pareja. Con gran carisma, el cortometraje antepone el amor al juicio social: “Si entras a mi hogar verás mi homosexualidad en todos lados, algo que no podemos expresar afuera”, menciona una de sus entrevistadas. De este modo, Manfredi encontró una solución a sus dudas sobre la representación exterior, optando por los elementos con los que se construye el hogar.

Tanto Sammut como Groneweg encuentran la importancia de los festivales en la oportunidad que se le brinda al público de ver cine que de otro modo no verían, de apoyar proyectos a los cuales no se les da prioridad de financiamiento: “Permitir que la gente vea cine queer. Dar apoyo para que se hagan más películas y los cineastas se puedan desarrollar. Descubrir y reconocer el trabajo. Eso siempre será lo importante para nosotros”, expresa el fundador el último día de la 13ª edición del festival.

Es así que el ganador del Queer Short Film Fund, encargado de apoyar los proyectos cinematográficos queer mediante un concurso basado en el pitch de sus guiones, fue paraBeer! Beer! de Popo Fan, debido a que “no hay suficientes comedias de calidad que reflejen la ironía and verdadera naturaleza de las relaciones LGBT, frecuentemente definidas por roles de activo-pasivo”. Gracias a que el director busca desafiar estas preconcepciones y estereotipos a través de la risa, se le confía explorar las identidades sexuales berlinesas con esta energía única.

Por su parte, Groneweg expresó que la importancia de XPOSED radica en las preguntas que suscita, necesarias para la conversación alrededor de la representación y valor político que las personas pueden encontrar reflejadas en la pantalla: “Queríamos hacer un programa diverso en todos sus sentidos, en términos de cuerpos e identidades, de formas narrativas, historias y nacionalidades. Estoy agradecida por los resultados y emocionada por el próximo año”.

El Festival XPOSED no sólo garantiza un espacio de proyección, discusión e intercambio de cine queer, sino también el apoyo indispensable para el desarrollo de proyectos. Este año, enfocado en la diversidad sexual, la corporalidad, el cine hecho por mujeres y el cine internacional, ha sido fiel a su propósito inicial: ofrecer películas que impacten, desafíen y cuestionen. El Programa de Diversidad + de Morelia felicita a todas sus ganadoras, así como a todos los proyectos que participaron, al formidable equipo de XPOSED que con pasión logra sacar este proyecto adelante cada año, y a los cineastas mexicanos quienes presentaron sus trabajos causando concientización y un acercamiento extraordinariamente emocional en el público.

The trees live standing: Colectivo ÁRBOL ROJO

By Antonio Harfuch Álvarez
(Tanslation: Diego Lizondo)

The State of Quintana Roo has established itself as one of the most important tourist destinations in the country. In addition to being globally known for its beaches, the initiatives of an extraordinary group of people have managed to promote and disseminate independent and auteur films. The capital of the state, Chetumal, which comes from the Yucatec Ch’aak Temal and means «where the red trees grow» also represents the name of an association that has raised its voice for the seventh art.

Árbol Rojo is the name of this group of film professionals who for two years have organized special exhibitions, cycles, and extensions both in the capital and in the paradisiacal municipality of Bacalar. In their recent, but prolific career, they have taken premieres and previews of films that could hardly have reached the southeast of Mexico. Some of the titles are Knife + Heart (La Daga en el Corazón, 2018) by Yann Gonzalez, Los Muchachos Salvajes (2012) by Patricia Ferreira and more recently Climax (Clímax, 2018) by Gaspar Noé. The strong alliances with institutions such as the Cineteca Nacional, the University of Quintana Roo and internationally renowned festivals such as FICUNAM, Black Canvas and recently, the incorporation of Cuorum Morelia, gave attendees the first exhibition of its Continuous Program that was carried out from February 21 to March 2.

The conversation with this passionate group began from the last edition of the Sexual Diversity Program of Morelia. From the moment the consultancy of the independent management of the Diversity Program in Morelia took place, Árbol Rojo has offered its caring support. In this new independent phase, thanks to the advice of experts, the foundations have been laid to create a project that moves away from cultural centralism.

In 2018, Árbol Rojo and the Sexual Diversity Program formed an important collaborative and operative alliance that was carried out in the Clavijero Cultural Center. The civil association showed its solidarity with an emerging team that celebrates the communion of two young and restless projects to make visible a cutting-edge cinema and diversity.

Árbol Rojo showed three qualities that contributed to the essence of the organization of the Sexual Diversity Program, today the Cuórum: Partnership, Complicity and Commitment. These values and attributes, necessary for the formation of a team united in the objectives of a noble mission and a vision, have as a core point the dissemination of quality cinema.

Reapariciones, Reparaciones (Reaparitions, Reparations) was the cycle presented in the State of Quintana Roo conformed by international, national premieres, short films of the past Sexual Diversity Program and the Forum of Identities. Thanks to the support and management of organizations such as the Human Rights Commission and Kybernus, this edition was a success.

With a total of 7 films and 12 short films that show the reality of people reappearing and repairing wounds after the loss, festivals such as Berlin, Cannes and Xposed were present. Las Herederas (2018) by Maricelo Martinessi, Terror Nullius (2018) by Soda_Jerk and the empowering Bixa Travesty (Marica travesti, 2018) by Claudia Priscilla and Kiko Goifman, were just some of the projections that strengthen the defense of identity and freedom.

Tania Claudia Castillo (Camelina de Plata, 2018), presented Un amor en Rebeldía (2018) by Tatiana Castillo. This documentary, which narrates the struggle of Yan María Castro, founder of the Oikabeth movement in Mexico under a context of discrimination and repression, defends the positions of gender and sexual diversity. To date, this struggle of Mexican women who remained invisible and subjected, is considered a milestone in the organization; a political movement that fought to gain its place in society.

María Bonita (2017) by Roxana Anaya presents the portrait of a trans woman who resurfaces despite being forgotten and the lack of recognition. Her lens dignifies, as a companion in the struggle, the Cabaret scene in Mexico. The documentary sensitizes and motivates us to look at places that in their time became fronts to make community with a special emphasis on diversity.

Lila (2018) by Paolo Wriedt elaborates a story about sexuality and experiences rarely seen on screen but judged. It tells the story of the sexual tension that arises between two cousins, not from the morbid interest, but from the incessant appearance of desire as a leafy territory to discover.

On the other hand, the director Jesús Torres Torres traveled to Chetumal and Bacalar to present his first feature Nadie Sabrá Nunca (2018) in front of students and audiences of all ages. They, captivated by the creative proposal to combine the melodrama with the western genre, applauded the plot of the story. In it, a mother and her son seek to escape from an overwhelming reality through the fiction of soap operas.

The Identity Forum, held at the initiative of Árbol Rojo, was a learning experience through dialogue and exchange of ideas with activists and cultural managers committed to their cause. Edwin Reyes made an urgent call for the acceptance and justice of people who have been harmed because of their diversity; the passion of Alejandro Silveira, director of Árbol Rojo, promoted a cinema of transversal diversity in the social and sexual, but also in the formal and aesthetic. Culture is encouraged to build empathy.

The efforts of Enrique Paniagua, an initiative of Kybernus, seek to strengthen the frameworks of legality with the LGBT + community and the struggle for human rights. Representing the Human Rights Commission of Quintana Roo, Ana Patricia Reyes, called to promote the improvement of diversity in the peninsula. Alejandra Suárez, a credible defender of human rights, moderated the Forum for Identities that offered tools to promote the acceptance and normalization of these issues.

The audience, witnessing the diversity and supporting each effort, went to each function to join a new panorama: to question heteronormativity and value diversity. People of all ages shared their experience: «Bones of Contention (2017) by Andrea Weiss is a film that should be seen in universities»; «What you see in Las Herederas (2018) by Marcelo Martinessi, is not very distant from what happens here in Mexico»; «Bixa Travesty (2018) by Kiko Goifman and Claudia Priscilla, is a new and powerful speech that demolishes every argument that had been made against sexism». «I thought that La Daga en el Corazón (2018) by Yann Gonzalez, was a gay movie but it is really diversity cinema, because we see the differences that there are in universal feelings like love and that this can exist in such different ways but that go to the same place. «

More than 1,000 people witnessed the cinema of diversity that seeks faithfully to find new ways of looking at others. From the organization of a strong team, skillful and aware of the importance of spreading quality and auteur films and that honors the meaning of Árbol Rojo, the cycle of Reapariciones Reparaciones ended with Knife + Heart (La Daga en el Corazón, 2018) by Yann Gonzalez. The director’s avant-garde proposal crossed the mind and heart of the Chetumale people as if it were a sharp and piercing weapon; the aesthetic diversity and the daring proposal will not be forgotten, nor will the universes created by Gonzalez to see the light in the darkest.

With this cycle curated for Árbol Rojo, the confidence of a team awaiting the emergence of new cultural projects and the insistence to continue them is confirmed, even when the situation seems complex. They have opened new spaces in Chetumal to continue building forums through the cinema. Under the strong belief of cultural projects in Mexico, a Quorum has been created for friends, family, moviegoers and activists.

From Cuórum, we are grateful to open the doors to the filmmakers of Mexico who have sought to repair historical wounds and reappear in the face of invisibility and censorship, in the face of fear and oblivion. Realities that have not been represented, and an unwritten past with which history would be different. Forces that reappear to people who are as vital as trees; trees that grow in the woods and in the cities remembering the indestructible feeling of which St. Thomas talked about: «He who has lost his passion has lost more than he who has lost himself in his passion».

Cuórum reiterates its deep and eternal gratitude to a strong and constant Civil Association, that does not lose sight and that in every activity that organizes puts the effort to demonstrate the wood with which they are made. Their example and inspiration have become a clear reference in the need to create responsible spaces and firm civil associations that provide counterweight and balance in society.

RESET, FRAGMENTOS DE LA DIFERENCIA. ENTREVISTA CON RODRIGO MARTÍN JAFFE

POR: ANTONIO HARFUCH ÁLVAREZ

15 de enero de 2019

Grande es la verdad, pero más grande todavía, desde un punto de vista práctico, el silencio sobre la verdad”.

Un mundo feliz, Aldous Huxley.

En Un mundo feliz, Aldous Huxley imagina una sociedad que modifica la genética y hace uso del clonaje para controlar y condicionar a los individuos; el método Bokanowsky, donde grupos uniformes de hombres y mujeres aman lo que tienen que hacer. “Todo condicionamiento tiende a esto: a lograr que el hombre ame su inevitable destino social” [1]. En este imaginario, Huxley plantea una divisa planetaria basada en la comunidad, la identidad y la estabilidad donde el hombre es capaz de superar a la naturaleza.

El director británico Stanley Kubrick, en 1971, llevaría a la pantalla grande con gran polémica la adaptación de la novela de Anthony Burgess, La Naranja Mecánica, que planteaba el Método Ludovico, un tratamiento de “reeducación” a criminales para ser reinsertados en la sociedad. Cualquier impulso de violencia provocaría en el paciente repulsión y dolor. En ambos casos, se muestra una inquietud por estandarizar desde la “invención humana”. Huxley para buscar la “estabilidad social” y Burgess-Kubrick para el “saneamiento social”.

Si ambos ejemplos parten de imaginarios distópicos en periodos de experimentación antes y después de la Segunda Guerra Mundial, actualmente existen centros de conversión sexual donde hombres y mujeres son internados, en muchas ocasiones, por sus propios familiares que consideran a la homosexualidad como una enfermedad.

Reset (Cortesía Rodrigo Martín Jaffe)

The Miseducation of Cameron Post (Desiree Akhavan, 2018), película galardonada con el Premio del Jurado en Sundance 2018 y basada en la novela homónima de Emily M. Danforth, cuenta los estragos que vive Cameron Post (Chloë Grace Moretz) en un centro de conversión sexual cristiana que a través de la culpa, motiva a sus internos a odiarse por sentir atracción hacia alguien de su mismo sexo. El filme muestra las repercusiones de estos centros que provocan desestabilidad psicológica y afectiva en los pacientes, lo que ha provocado un gran debate sobre la naturaleza de estos métodos y por ende su prohibición legal.

México no es la excepción. En un país donde reina el machismo, la homofobia y la misoginia, posicionado en el segundo lugar, después de Brasil, por más crímenes cometidos por homofobia, la homosexaulidad es más un objeto de persecución. Un país católico que defiende a periodistas debatiendo sobre si la orientación sexual es “normal”, y una Iglesia que encubre a verdaderos criminales que abusan sexualmente de menores sin que haya un juicio civil. El “crimen” de ser homosexual en México lleva a las personas al  armario de la represión sexual, al aislamiento social y a una creciente tasa de suicidio juvenil a nivel mundial, con el lugar 78 de 100, el tercer lugar en América Latina después de Brasil y Argentina, según datos de 2012 de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El pasado III Programa de Diversidad Sexual de Morelia, presentó en su Competencia Nacional de cortometraje a Reset, del realizador regiomontano Rodrigo Martín Jaffe que llevado por su propia experiencia familiar y de su observación crítica del contexto en el que vive, construye el relato de una sociedad reseteando la homosexualidad. Co-escrito con el también productor Emilio Leija, se asoma a la historia de Manuel, un adolescente sometido al procedimiento Reset por su propia madre. Manuel a su regreso vive en un estado de depresión y repulsión por su atracción a personas de su mismo género. Es su hermano, quien lo ayudará a intentar revertir este tratamiento en una realidad distópica hiperconectada donde la diversidad es ilegalidad.

Rodrigo Martín Jaffe (Cortesía)

El cortometraje logró una Mención Honorífica en el Programa de Diversidad, “por un guion original sobre un futuro distópico que trata de devolver la humanidad a sus personajes y que además nos alerta de una sociedad que pretende imponer su heteronorma, ofreciéndonos a la vez, una solución universal: el amor”.

En entrevista para el blog, Martín Jaffe habla de lo personal que es esta historia y de cómo ha logrado conectar con el público de más de 30 festivales alrededor del mundo. “ Lo que yo escribo sale a partir de los demonios a los que me tengo que enfrentar a lo largo de mi día a día. Hacer cine es una manera de librarse de ellos. Al ver una película nunca sabemos que lo que presenciamos es justo lo que necesitábamos ver. Me da gusto que la gente se vea reflejado en este corto”.

“Una familia de tantas”

El guion que tuvo más de 20 tratamientos y contó con la asesoría de Juan Manuel González, director de la carrera de Producción Cinematográfica Digital de la Universidad de Monterrey, se inspira en entrevistas que hizo a amigos de todo el mundo acerca de sus relaciones familiares, en donde descubrió que la dominación y opresión en las familias no sólo tenía que ver por motivos de diversidad sexual sino a las dificultades a las que alguien “diferente” se enfrenta con su familia y la sociedad. “La normalización de contenido LGBT+ me parece que es muy necesaria, no sólo como una historia sobre salir del clóset o de aceptar quién eres. En este caso se trata de cómo la familia y el entorno te buscan someter aunque luego también pueda aparecer la aceptación”.

Reset (Cortesía Rodrigo Martín Jaffe)R

La historia provoca una reflexión emocional al abordar las relaciones familiares y lo importante que es su base armónica para la aceptación e inclusión de las minorías. “Pienso en la madre no como el personaje antagónico sino como testamento de todas estas relaciones que por diversos motivos no logran desarrollarse. Ella les dio ciertas bases a sus hijos para poder quererse y cuidarse. En las historias más tristes de familia, hay ciertos momentos donde los padres quieren a sus hijos y donde se enseñan a querer. El error que ven los padres, es cuando los hijos se descarrilan, cuando se dan cuenta que son individuos que piensan por sí mismos, que sienten por sí mismos, que pueden controlarse”.

El proyecto tenía la intención de hablar de su relación personal con su hermano menor pero desde la ficción. “Cuando lo terminamos de ver en el examen profesional, tuvimos un momento muy catártico donde mi hermano y yo nos abrazamos. A toda mi familia le emocionó. Yo había tenido conversaciones con ellos respecto de mi sexualidad. El corto ayudó a cerrar el ciclo. Especialmente mi relación con mi hermano. Fue un corto dedicado a él”.


“Necesito del mar porque me enseña”

La Mar de Pablo Neruda.

Entre las referencias argumentales y visuales de Martín Jaffe destacan realizadores como Yorgos Lanthimos (The Lobster, 2015), Xavier Dolan (Les Amours Imaginaires, 2010) y Julio Hernández Cordón (Te Prometo Anarquía, 2015). “Me fascinó la idea de Lanthimos  de la creación de un mundo muy parecido al nuestro pero con un elemento distópico”. Mientras en The Lobster, la soltería es vista como innatural y los individuos deben permanecer en un hotel hasta encontrar pareja en menos de 45 días, en Reset, las personas son sometidas a un internamiento forzoso de tácticas terapéuticas de aversión que finaliza con una marca en el antebrazo de los pacientes.

Y tu Mamá También (IMDb)

Del mexicano Hernández Cordón, se inspiró en el diseño de arte de Te prometo anarquía (2015) que define como “sketchy” pero también con influencias argumentales. “Era esta historia de dos personajes en contra del mundo, contra una sociedad. La filmografía de Alfonso Cuarón también es referencia de manera indirecta por los personajes que son arrasados por el contexto en el que viven como en Los Hijos del Hombre (2006) o Y tu Mamá También (2001)”.

De Xavier Dolan, se inspira en la puesta en cámara y en el uso de recursos tanto visuales como metafóricos, como en las secuencias donde ambos hermanos imaginan que están en una playa. “Cuando vi este recurso en las películas de Dolan quise usarlo. Quizá nunca pudieron llegar hasta allá porque el ambiente donde vivían los consumió. No hay la posibilidad pero ellos construyen su propio paraíso dentro de su realidad. Como una declaración de que no importa el exterior. La playa es un fragmento de su imaginación y una aproximación a su pensamiento. A pesar de todo lo que están viviendo, están unidos y seguirán así”.

Historias por ver

Rodrigo Martín Jaffe es un director curioso, productivo, inquieto. Está en la búsqueda de un cine que muestre otros lugares, otros paisajes, otras historias de México. “Me parece que vivimos en país muy diverso y hermoso, que tiene mucho que ofrecer a nivel visual y humano ¿Cuántas historias nos estamos perdiendo por no poder voltear a verlas? La película de Ernesto Contreras Sueño en otro Idioma (2017) tiene el gran logro de ser filmada en Veracruz. En ese sentido me parece también muy importante la descentralización del cine”.

En el centro: Rodrigo Martín Jaffe, Tania Claudia Castillo y Emilio Leija (Morelia Programa)

Rodrigo Martín Jaffe cierra hablando de su paso por la Competencia Nacional de Cortometraje del Programa, al que ve como un encuentro de propuestas que generaron diversidad de opiniones y de públicos. Como un programa que mira al futuro desde un presente consciente. “Por ejemplo, Un Amor en Rebeldía (Camelina de Plata 2018) de Tania Claudia Castillo proviene de un pasado y lo combina con un presente. Para algunos podría tener un aire nostálgico y para otras personas significa la oportunidad de obtener luz y no olvidar de dónde vinimos”.

El siguiente paso profesional para Rodrigo Martín Jaffe después de Reset, fue dentro del primer Concurso Puerta de la Creación, donde su cortometraje Las Estrellas También Mueren, resultó ganador. Además de continuar con la exhibición de este trabajo en festivales, también se encuentra en la elaboración de la que proyecta sea su ópera prima, una road movie de Monterrey hacia otra ciudad.

[1]  Huxley, A. Mundo Feliz (1969). Plaza y Ganes: Barcelona, p. 20.

Fuentes:

LOS DÉBILES: PALABRA Y SENTIMIENTO EN LA IMAGEN

POR ANTONIO HARFUCH

LOS DÉBILES (Premio FICUNAM, 2018) es una película de venganza y persecución situada en Sinaloa, territorio mexicano altamente hostil en la llamada Guerra de las Drogas. Los directores Raúl Rico y Eduardo Giralt presentan, desde una mirada íntima y reveladora, un microcosmos donde un hombre, Víctor sale en búsqueda de “El Selfie”, miembro de una pandilla de jóvenes que mató a sus perros después de un confrontamiento. Estrenada en el FORUM de la BERLINALE 68, donde el también guionista Raúl Rico, tuvo la oportunidad de conversar en una interesante sesión de preguntas y respuestas donde el público reconoció la propuesta narrativa de un film que según su propio director, debe ante todo leerse. “Lo que más nos importa es que la gente lea la película y cuando te das cuenta que una película pequeña logra estrenarse en Berlín, entonces es cuando también agradezco cada comentario”.

En la narrativa, destaca un tono especial cuando se plantea la violencia en una coodirección que tiene en sí sus propios retos. El cruce de ambas visiones se visibiliza en referencias literarias y en el sentimiento de la imagen proveniente de la poesía. “A mí me interesa la literatura del teatro del absurdo y a Eduardo la literatura del sur gótico de los Estados Unidos. Entonces fue volver a revisar estos textos que se escribieron en esa época. Por mi parte a Eugene Ionesco y a Eduardo a William Faulkner. Por ejemplo, hay un texto que se llama RINOCERONTE, en el cual todo un pueblo en Francia se está transformando en rinocerontes y el personaje principal que es considerado el tonto del pueblo, permanece intacto y es el único que sigue siendo humano. En el caso de la película, el personaje principal que sale de la parte más rural de México y se va introduciendo en la ciudad hasta terminar en una especie de isla absurda, es el único que permanece puro o intacto a esta contaminación. En el texto de Ionesco vendría siendo una especie de héroe antifascista, un héroe que se está protegiendo o no se vuelve igual a los demás, a esta gente agresiva o violenta”.

La violencia en LOS DÉBILES presenta capas que eran invisibles, lo que hace que se vea desde un ángulo con el sello de denominación de origen, donde es distinta a la representada comúnmente en los medios de comunicación y en el arte y cine contemporáneo. “La idea de mostrar una violencia contenida o si quieren pasivo-agresiva, es precisamente mostrar una idea distinta de violencia. En México se ha mostrado una cierta banalización de la violencia. En LOS DÉBILES se encuentra muy pasiva, muy contenida, en la cotidianidad. Podría ser que te pudieras topar con esta violencia y ni siquiera saber que es un acto violento porque estás tan acostumbrado a ella que no eres capaz de percibirla a nivel consciente. Yo por ejemplo, soy de este lugar de donde la película ocurre (Mazatlán) y viví allí hasta los 18 años, después me mudé a la Ciudad de México y tuve que tomar cierta distancia para entender de qué se trataba esa violencia. Yo no la veía porque estaba allí”.

En cada cuadro de LOS DÉBILES está la esencia de una realidad vuelta un relato que no deja de ser emocionante en el tratamiento de la violencia. “Nuestro objetivo era seguir la emoción más que cualquier referencia en particular. No hubo ningún secreto, buscamos mucho perseguir una emoción, la sensación de la escena. La película fue mutando conforme fue avanzando el corte pero siempre perseguíamos una idea más que tratar de llegar a un destino”, comenta. “La problemática de la violencia está arraigada en la cultura de un país porque viene desde el núcleo, de las familias, de las instituciones que forman a un país. La niñez es la que recoge toda esa contaminación. El gobierno ha intentado romper con este patrón cultural con más violencia. La educación podría ser la solución”, finaliza Raúl.

El realismo se innova en este relato poético en cada capítulo que nos va presentando una puesta en escena ya con propios retos técnicos y financieros. “Tenía la idea de escribir una poesía que se llamara LOS DÉBILES acerca de la gente oprimida que viajaba en los hombros de un gigante, el cual caminaba a través del mar hacia los umbrales de la muerte. Estamos conscientes de las carencias técnicas de la película, incluyendo las actuaciones que no son de carrera. Sacrificamos los tecnicismos en favor de documentar la realidad. La gente de rancho en México tenemos mucho carácter”. Rico tiene formación en Administración de Empresas y Negocios Internacionales. “Tuve restaurantes, esta es mi primera película y tengo 34 años”.

La realidad que se documenta en LOS DÉBILES también proviene de una urgencia antropológica proveniente del estructuralismo de Claude-Lévi Strauss (TRISTES TRÓPICOS, 1955). “Lévi Strauss decía haber llegado muy tarde a estudiar las tribus originarias. Ya habían estado contraminadas con la cultura de occidente. Yo no quería lamentarme de en algún momento volver a Mazatlán y encontrar que esta gente de rancho de zona rural, con esta especie de migración, desapareciera. Quizá era hacer un retrato sobre la gente rural de Mazatlán, de donde soy yo”.